Geología de la provincia de Alicante
Alicante en la cordillera Bética
Submenú
• Introducción
• Historia geológica
• Alicante en la Cordillera Bética
• Relieve actual
Prebético
Las rocas más antiguas del Prebético son rocas sedimentarias continentales y litorales del Triásico. Debido a la gran cantidad de evaporitas (que son rocas poco densas), estos materiales han llegado a salir a superficie a favor de fracturas, perforando las rocas más modernas situadas encima. Estas extrusiones de materiales reciben el nombre de diapiros. Los diapiros más significativos de Alicante son los de Pinoso (Cabezo de la Sal, desde donde se extraen salmueras que se utilizan en las salinas de Torrevieja), el de Altea y los localizados a lo largo del valle del Vinalopó. Otros afloramientos destacados de materiales triásicos son los situados al sur de la Sierra de Crevillent, en Agost, en el río Monnegre (figura 5) o en Jalón.
Figura 13
Atendiendo a su edad, los siguientes materiales son los del Jurásico, los cuales están formados por rocas carbonatadas que afloran de manera muy reducida en núcleos de pliegues o a favor de fallas con importante salto en vertical y en dirección (Cabeçó d’Or, Fontcalent- figura 6-, Puig Campana, etc.).
La siguiente etapa de la historia de la Tierra, el Cretácico (entre 144 y 65 millones de años) es la mejor representada en la provincia de Alicante. Los materiales del Cretácico afloran ampliamente dando importantes relieves montañosos (como las sierras de Mariola, Serrella, Aixorta, Alfaro, El Cid, Gelada-figura 7, Salinas, Solana, Peñarrubia, El Cid, Maigmó, Ventós, Onil, La Grana, Orcheta, Castellets, Ponoig, Bernia, Ferrer, Carrascal de Parcent, Mediodía, Montgó, Segaria, Mustalla, etc.). Estas rocas del Cretácico son mayoritariamente calizas organógenas (ricas en fósiles), destacando entre ellas las calizas con rudistas y las calcarenitas de orbitolinas.
Las rocas del Paleógeno (es decir con una edad comprendida entre los 65 y los 23 millones de años) de la provincia de Alicante consisten en gran medida en calizas arrecifales con alveolinas y nummulites que ocupan, por ejemplo, las cumbres de las sierras Serrella, Bernia y Aitana, entre otras. En el Coto (norte de Algueña) estas calizas se explotan como piedra ornamental, la cual recibe el nombre comercial de “crema marfil”. En áreas más meridionales estas calizas no afloran y en su lugar aparecen margas ricas en foraminíferos planctónicos, con intercalaciones de turbiditas.
Subbético
El Subbético está mucho menos representado en la provincia de Alicante. Aflora exclusivamente en el sector occidental de la provincia, al oeste del valle del Vinalopó entre las poblaciones de Pinoso y Crevillent. Sus principales afloramientos los encontramos en las sierras de Reclot, Algayat y Crevillent, que constituyen el extremo oriental de los afloramientos subbéticos de la Cordillera Bética. Está caracterizado por varios tipos de rocas carbonatadas con ammonites, braquiópodos y crinoides, de edades comprendidas entre el Jurásico y el Cretácico. En el Subbético también afloran los materiales del Triásico a favor de fracturas.
Zona Interna
En la Zona Interna se incluyen aquellas rocas que proceden de sedimentos que, aunque también se depositaron en el Océano de Tethys, lo hicieron en una zona mucho más alejada de Iberia que los de la Zona Externa. Estas rocas se depositaron alrededor del continente Mesomediterráneo. En el caso particular de la provincia de Alicante, sólo encontramos rocas del Triásico. Además, estas rocas han sufrido una larga y compleja historia geológica ya que los sedimentos originales se transformaron en rocas sedimentarias y, muchos millones de años después, fueron sometidas a elevadas presiones y temperaturas que las transformaron finalmente en rocas metamórficas.
En la actualidad las rocas de la Zona Interna se extienden al sur de la línea Alicante-Crevillent ocupando el tercio meridional de la provincia. Sus afloramientos son muy escasos, destacando las Sierras de Callosa (figura 12) y Orihuela, si bien existen otros de menor entidad como el de Catral o el de la isla de Tabarca. Este último afloramiento constituye el testigo más oriental de la Zona Interna.
Esta zona está constituida en general por rocas metamórficas, si bien dentro de nuestra provincia el efecto del metamorfismo es ligero, por lo que se llegan a reconocer bien los rasgos originales, sedimentarios o ígneos, de sus materiales. Se trata de cuarcitas y filitas en la base, coronadas por una potente serie de carbonatos (calizas y dolomías algo recristalizadas con algunos niveles de yeso). En este conjunto aparecen intrusiones de rocas ígneas básicas (cantera de Orihuela).
Cuencas sedimentarias Neógeno-Cuaternarias
Sobre las rocas de estos dos dominios (Zona Externa y Zona Interna) se apoyan un conjunto de cuencas sedimentarias que están rellenadas por rocas de edad más reciente (aproximadamente de los últimos 25 millones de años). Estas rocas más jóvenes las podemos encontrar en el sector septentrional en cuencas como las de Alcoy, Tibi (figura 13), el valle del Vinalopó o el norte de la provincia de Alicante (figura 14). En el sector meridional de la provincia se encuentra la cuenca más importante de todas, la del Bajo Segura.
